Iria Reguera iriareguera Las rupturas suelen ser demoledoras en la mayoría de los casos. Nosotras hemos cambiado durante ese tiempo, pero es que el mundo también ha cambiado y nosotras no nos hemos dado casi ni cuenta. De repente te encuentras soltera, por primera vez en muchos años - tal vez por primera vez desde que eras adolescente - y todas las reglas de la soltería han cambiado. Después de pasar el recomendado duelo y cuando por fin te sientes preparada para empezar a conocer a nuevas personas y tener citas te das cuenta de una realidad innegable: no sabes cómo ser una mujer soltera. Estar soltera y no saber cómo Uno de los primeros síntomas que notamos es que ya no sabemos cómo ni dónde ligar. Las opciones que te quedan son, o bien, aceptar que tus amigas y conocidas te presenten a todos los solteros que consideran serían ideales para ti, o hacer caso a quienes te recomiendan abrirte un perfil en todas las redes sociales para encontrar pareja que existen. Y es en este paso donde, muchas veces, somos realmente conscientes de que todavía no sabemos estar solteras. Pero la confianza y la intimidad no se pueden manufacturar, y empezar a conocer a alguien de cero no se parece en nada a la intimidad que tienes con una pareja de largo recorrido. Muchas de nosotras nos hemos encontrado pidiendo y esperando cosas de ese chico que conocimos hace dos citas y cuatro besos que no corresponden a una 'relación' tan breve.
Tengo muchos amigos que se han casado y no creo que sea justo discriminarles. Por supuesto, hay quien elige de forma deliberada no tener galán. Conozco al menos a una andoba que piensa así: sencillamente, no cree que ser pareja sea para ella y no se molesta en buscarla. La soltería, e incluso el celibato como opción consciente, pueden ser magníficos caminos para el crecimiento personal. Denial obstante, en muchas ocasiones, el soltero no quiere estar soltero y denial puede hacer nada para remediarlo.
La colección de discos, sin una mancha de polvo y ordenada alfabéticamente; una simetría rancia y, sin embargo, tranquilizadora. Esta imagen llena de connotaciones negativas ha pervivido a lo largo de la historia, incluso con cameos en productos culturales tan populares como las canciones de The Beatles. Si lo desafían, se les acusa de acaecer traicionado su rol de género, nos dice en conversación telefónica. La aparición de los gatos Es precisamente en la época de los juicios por brujería cuando las mujeres solas empiezan a ser asociadas con un accesorio que les ha acompañado hasta la actualidad: el gato.