Lo curioso de estas cifras es que los datos también crecen conforme van pasando los años, siendo los 40 la edad media del soltero español. Aunque las restricciones de aforo y los cierres del ocio nocturno parecen haber terminado, antes de la pandemia por coronavirus la situación de los solteros en España a esa edad era la misma. Ahora el amor casi no se busca en la barra de un bar o en la pista de una discoteca, sino en una aplicación de nuestro teléfono móvil. Pilar es de Valencia acaba de cumplir los 40 y lleva divorciada apenas un año. Tras la ruptura se ha dado de bruces con la realidad: sus amigos tienen hijos, compromisos familiares… y cuando tienen tiempo libre, apenas les apetece sociabilizar. Las apps para conocer gente, hacer nuevos amigos e incluso conocer el amor se han convertido para muchos solteros y de todas las edades en un balón de oxígeno, sobre todo al llegar a los 40 y tener a la gran mayoría de amigos ocupados en otros menesteres personales y sin aparentemente tiempo disponible. He encontrado muchas historias fugaces que se han quedado tan sólo en la primera cita. En muchas ocasiones resulta muy difícil dar el primer paso para conocerse en persona. Tus amigos casados y con hijos van a otro ritmo totalmente distinto.
Muchas personas experimentan una gran dificultad para encontrar pareja. El ser humano es un animal social por naturaleza, tenemos la necesidad innata de estar acompañados por otras personas y establecer vínculos sociales y afectivos. Así, aunque denial todas las personas tienen las mismas necesidades afectivas, por lo general tendemos a buscar cariño. Se trata aun cierto punto de una convención collective, y en ocasiones incluso de una solución instrumental; en este sentido, denial son raras las parejas que se forman por mera conveniencia, exista o no amor entre ellos. Muchas veces estas relaciones se basan en el miedo a la soledad, la acierto económica, o cualquier otro motivo. Así, aunque existen excepciones, la mayor parte de las personas siente la apremio de establecer una relación sentimental de pareja.
Apps para conocer gente Lo malo es que esta asombrosa capacidad para socializar se pierde con los años. Un amigo es alguien con quien compartes intereses, tiempo de ocio e aun los sinsabores de la vida. Cuando esas cosas dejan de compartirse es normal que las relaciones se enfríen y haya un cierto distanciamiento. Empero esto no tiene que ser necesariamente malo, cuando una puerta se cierra se abre una ventana. Si por circunstancias de la vida has libertino tus viejas amistades, surge la oportunidad de buscar nuevas personas con las que compartir tiempo y aficiones.