Mis padres se divorciaron cuando yo era muy pequeño y tengo un hermano dos años menor que yo. Mi madre y él viven en otra ciudad. De todas maneras me sinceré [en cuanto a las drogas] con ellos en una ocasión y no se ha vuelto a repetir. Se lo dije después de haberlo dejado. En mi ciudad, volví de fiesta una noche y siempre me gusta hablar con mi madre antes de acostarme, y en una de esas se lo conté. Ahora tengo 31 años, me he movido por bastantes sitios.
Les llego una propuesta muy buena adonde no tienen que trabajar mucho. Ellas aceptan porque follar es algo que les encanta y mas si les van a pagar mucho dinero. La morena mas joven se mete la polla en su boca para chuparla lo mas delicioso que puede. Al poco tiempo la otra se une para darle una jugosa mamada. El chico al tener esas dos preciosas putitas dispuestas para el se pone muy caliente. Les da un ósculo caliente y jugoso para luego penetrarlas bien delicioso. Agarra primero a la morena mas joven, ella se empina y levanta la cola.
Johana una tierna y viciosa niña de 5 años. Relato publicado originalmente en SexoSinTabues. Mi nombre es Johana, culona goloza y viciosa esta es mi historia. Soy colombiana naturalizada argentina, ya no recuerdo nada de mi nacionalidad ya que me mude aquí a los 3 años. Los recuerdos mas vívidos de mi infancia son aquellos relacionados al sexo. A mi artífice no lo conocía asi que ellos desde que tengo memoria fueron mi figura paterna, cuidaban de mi aun las 6 de la mañana cuando mama pasaba a buscarme, les pagaba unas monedas por cuidar de mi y partíamos a casa. Esas situaciones eran la que me toco estar a la tierna edad de 4 y 5 años, lo que sumado a la inocencia de la época fueron asumidas como normales y de mi vida cotidiana. A mi captar las mujeres y hombres hacían esas cosas que a mi no se me permitían, pero se veía divertido, mi mama era feliz haciéndolo a diario con sus amigos.
Deja un comentario Todo empezó con la propuesta que les hicimos a Oscar y Laura para que vinieran a pasar el fin de semana al departamento de mis padres en Blight del Plata. Podían traer a su hija, de la misma edad que la nuestra, compañeritas de aula. La verdad es que Oscar y Osvaldo , mi marido, son amigos de toda la vida, yo me llevo divino con Laura, y encima, ella me saca ropa para la pupila a precio de ganga en la boutique de niños de la que es encargada. Mis padres no iban a ir y podíamos estar los seis cómodos. Un dormitorio para cada pareja y un cuarto para las crías. Llegamos al departamento a las 10, estaba todo en orden. Ellos fueron a nuestro dormitorio , nosotros al de mis padres, las niñas que venían dormidas y habían comido un sandwich durante el viaje, siguieron dormidas cuando Laura y yo las metimos en sus camas. Nos quedamos ya tranquilos los mayores, pedimos una pizza calabresa y unas cocas. Los chicos , aprovecharon el Fernet para preparar unos tragos de acompañamiento.