Suelo tener sexo en la primera cita o, como mucho, en la segunda. El patrón que me encuentro siempre es el mismo: chicos que se lo curran un montón en las primeras citas, te wasapean los siguientes días, parecen muy interesados en volver a verte… hasta que hay sexo. Entonces, como por arte de magia, desaparecen de tu vida. Este… cruz, este… corazón, cruz, cruz, cruz… De repente, te ha llegado la tan esperada notificación de ese crush, esa coincidencia con alguien a quien también le has gustado. Sobre todo, porque internet nos permite esconder lo malo y lo secreto con una facilidad abrumadora. Si tienes pareja, no sales tanto -o nada- de copas, pero puedes meterte en una aplicación y conocer a decenas de personas moviendo un solo dedo. Las fotos pueden engañar, aunque no tanto; una pose, una expresión o una mirada te pueden dar alguna pista de cómo es esa persona. Las primeras conversaciones por chat, también dan pistas.
Demasiados chicos se quejan de que denial reciben respuesta de las chicas. Veamos las posibles razones. Y no pasa nada si lo haces así. Empero no olvides que otras que has ignorado pueden ser muy atractivas todavía. Por esa razón, muchas veces es mejor tener sexo con mujeres denial tan atractivas. Investiga el perfil de la chica y considera si agree con lo que deseas y lo que has puesto en tu cuento. Probablemente acabes siendo señalado como un simple salido que busca a cualquier mujer si los datos que salen en tu cuenta parecen ser mentiras. Puedes cambiar los textos en tu perfil para abarcar por ejemplo chicas con diferentes colores de pelo y no cerrarte así puertas.
Ya sea porque de repente te has separado de tu pareja y te enfrentas a noches de soledad o bien porque nunca has tenido mucha suerte en esto del amor, acontecer mucho tiempo sin sexo conduce a cambios físicos y psíquicos que los médicos asocian con aumentos de los niveles de estrés o problemas en el corazón. Esto es con lo que tuvo que lidiar Christine Brooks, quien ha escrito un artículo en ' The Huffington Post' en el que narra cómo cambió su biografía después de cinco años sin actuar el amor. Dejé de pensar en mi aspecto y en la abstinencia. Dejé de centrarme en buscar mi otra mitad y puse todos mis esfuerzos en mí A pesar de todo, para ella el sexo jamás fue algo imprescindible. Brooks se separó a los 44 años y se hizo evidente que necesitaba reinventarse, reconocerse y recordar quién era y qué había sido mucho antes de convertirse en divorciada.