La sexualidad: una perspectiva cristiana De: Salud sexual — Paso a Paso 69 Cómo iniciar la conversación sobre temas relacionados con la sexualidad La sexualidad es un tema importante para los cristianos de hoy en día. Ya no puede ser considerado como algo sobre lo cual no hablamos y con lo cual solamente lidiamos en privado. Debemos asumir los resultados del comportamiento sexual que vemos en nuestra sociedad. El propósito de Dios para el sexo No hay razón para considerar el sexo como algo malo y pecaminoso. Su propósito no es solamente la reproducción sexual. Dios diseñó el sexo para desarrollar una relación matrimonial efectiva basada en el deleite y placer mutuo del mismo. Dios diseñó el sexo para el placer, como una expresión de amor para el disfrute tanto del hombre como de la mujer. El matrimonio El ideal de Dios para el sexo es que nos abstengamos antes del matrimonio y seamos fieles a nuestra pareja dentro del matrimonio. Estos límites son para nuestra propia protección.
Feed muchas opiniones disponibles para cada una de estas preguntas. Y seamos honestos. Mi opinión frente a estas preguntas no importa, y tampoco importa la opinión de tu mejor amiga. Jesucristo es el que te creó como un ser sexual. A toda hora siento un nudo en la garganta por el deseo de conocer tus juicios. Si eres una hija de Dios, eres una extranjera en esta tierra.
Esa fuerza poderosa es el impulso venéreo. El deseo de tener relaciones sexuales es algo que Dios creó dentro de nosotros. No es sucio tampoco malo. El deseo sexual fue aim de Dios—no nuestra. El creó esas hormonas dentro de nosotros que hacen que el sexo opuesto nos atraiga. Las relaciones sexuales, como las diseñó Dios, son hermosas. El impulso venéreo no es pecaminoso, pero Dios nos dice que debemos controlar ese ambición. El ha declarado muchas veces en la Biblia que debemos mantenernos puros y debemos guardar nuestro cuerpo para la persona con la que un día nos casaremos. El impulso venéreo se puede comparar al hambre.
Comunidad cristiana Carol Peters-Tanksley, norteamericana, es ginecóloga, endocrinóloga reproductiva, autora de libros sobre salud femenina y una cristiana comprometida en tareas de evangelización, sobre todo animando a un estilo de biografía sano en lo físico y lo espiritual. Reflexionando sobre las dificultades que pueden aparecer en la vida venéreo de un matrimonio cristiano ha detectado 9 características que se deben adeudar en cuenta. Recuerda que Dios creó el sexo hombre y mujer los creó, Génesis 1,27 pero que distorsionado o mal usado puede destruir vidas y familias. El debate tras esa premisa es para otro día. Una relación sexual sana: 1. Si entreambos se centran en el otro, la mayoría de las dificultades se superan. Tiene etapas, temporadas La vida, y el matrimonio, tienen estaciones, temporadas, cheat distintas necesidades en lo íntimo. Se ha de tratar como algo eficiente, un don precioso que vale la pena guardar, en el que se ha de trabajar, en el que vale la pena mejorar, hacerlo prioritario, invertir en ello, rezar por ello.
La vida sexual de una persona que no es casada es una gran preocupación para Dios. Aunque te rebeles contra su posesión, le perteneces a Dios. Él te hizo y tiene el derecho absoluto de decirte lo que es bueno para ti. Y mi oración desde el principio es que puedas arrepentirte de tu alzamiento, incredulidad y desobediencia, y que puedas confiar en Cristo para perdón y vida para la gloria de Jesucristo. No eres de tu propiedad, fuiste comprado por un precio. Así que glorifica a Dios en tu cuerpo 1 Corintios ,